2016-09-16
BROMO – KUTA
Hoy era un día especial, un día para recordar, el
ultimo día del viaje.
Para empezar, ha amanecido un día magnifico, parece
que los dioses le han oído a mi amigo Jaume Borbones, lo que me ha permitido,
no solo ver el imponente paisaje del parque nacional de Bromo, si no que
circular por dentro del cráter y acercarme al volcán que tiene unas permanentes
fumarolas. Es una cosa impresionante.
Los que os acerquéis por aquí, como German Gabriel,
os aconsejo, que si queréis circular por dentro del cráter, lo hagáis con
ruedas de tacos, ya que las ruedas se hunden en la ceniza y de otra forma seria
imposible.
Una vez abandonado Bromo, he empezado a recorrer los
324 Km. que me separaban de Kuta. Pensaba que siendo viernes, las carreteras
estarían mas vacías de lo habitual, pero me he dado cuenta que en esta parte de
la isla de Java, no deben de ser musulmanes, ya que las mezquitas estaban
vacías, los colegios llenos de niños y las carreteras como de costumbre, llenas
a rebosar.
Después de unos 200 Km. he llegado al transbordador
para cruzar a Bali. El embarque ha sido bastante rápido pero la travesía, que
es corta, ha durado una hora, debido a que hay mas barcos que lugares de
atraque, con lo que los transbordadores están en fila esperando a que salga uno
para poder atracar el siguiente. Una cosa alucinante.
Al poner pie en Bali, parece que estas en otro país,
que no pertenezca a Indonesia. Para empezar, es una isla, nunca mejor dicho,
budista en un país musulmán. La arquitectura es diferente, los templos son
diferentes, las carreteras son muy buenas y están correctamente pintadas, hay
una limpieza que no había ni en Sumatra ni en Java, etc. Lo que decía, otro
país.
El recorrido hasta la entrada de Denpasar, ha ido
bastante bien pero el cruzar la ciudad para llegar a Kuta, ha sido un
viacrucis, pero al final he podido instalarme en el hotel y llegar a la meta de
este viaje.
Aunque esto no termina aquí, ya que los que hemos
andado en la montaña siempre decimos que, una ascensión a una montaña termina
en el campo base o en el punto de partida. Ahora empieza la tramitación para el
envío de la moto en container a Bilbao, vía marítima, y la larga espera de su
llegada.
Tengo que dar las gracias a los que de una manera o
de otra, han colaborado en que pueda realizar esta aventura, como son Motos
Javier de Pamplona, BMW Motorrad Ibérica, Touratech y Cavalle textil.
Por supuesto, a todos los que diariamente habéis
seguido mis crónicas, a los que me habéis mandado mensajes de animo, a los que
habéis dado vuestras opiniones y vuestros consejos, a los que me habéis ayudado
en situaciones complicadas, incluso perdiendo horas de sueño, a los que me
habéis dado fuerza, empuje y aliento, estoy seguro que sin vuestra energía,
todo esto habría sido mucho mas difícil, ya que no es lo mismo estar solo que
sentirse solo. GRACIAS A TODOS.
Evidentemente no puedo olvidarme de Jordi Jorba, que
desde allí donde este, me ha acompañado diariamente con su lema “ON THE ROAD
AGAIN”.
Nos vemos próximamente